A lo largo de mi vida he sido testigo de más de una situación en la cual una chica era presionada por su novio/amigo con derecho/lo que sea, para hacer cosas que ella, en realidad, no quería hacer.
La sensación que la gente sufre en esta situación es de todo menos agradable. Las personas se dividen entre el miedo a perder a sus parejas, ya que estas se sirven de amenazas y de la perspectiva de dejarlas si no acceden a sus deseos, y la incomodidad y el desagrado ante la idea de ceder, cosa que en la mayoría de los casos termina sucediendo.
Esto ocurre porque, vamos a llamarlo, la “víctima” desea la compañía de su pareja de tal modo que el miedo a perderla termina siendo superior a su comodidad, a su seguridad y, ante todo, al ritmo que quiere llevar en su vida sentimental y sexual.
Pero os puedo asegurar que siempre, la mejor opción es no dejarse intimidar, por mucho miedo que se le tengan a las amenazas de ruptura de la pareja o la presión que esta pueda ejercer.

Pero puede ser mucho peor, ceder a la presión puede tener consecuencias mucho peores si los “requerimientos”, incluyen mandar contenido erótico a través del Internet. ¿Todos sabéis lo que es el ciberacoso sexual, no? Sé que es un tema duro, pero tiene mucho que ver con lo que os estoy contando. En estos casos, las consecuencias pueden ir mucho más allá de los malos sentimientos que puedas llegar a experimentar con respecto a tu persona, sino que pueden tener consecuencias terribles que escapan totalmente a tu control, y que todos conocemos de sobra tras tanta información en telediarios y charlas.
Por favor, no dejéis que os pase esto.
Sé que puede ser difícil, sé que es una tontería hablar de que la otra persona no merece la pena, de que en realidad no os quiere, o de que pronto encontrarás a otro mejor, porque una persona “enamorada” no puede ver estas cosas hasta que no se da cuenta por sí misma, pero es que es la verdad.
Es cierto que una persona que de verdad quiere a otra no la presiona para conseguir sus deseos; que el amor implica respeto, y que amenazar y chantajear emocionalmente es una falta de este importantísima; que esa persona no merece la pena, que se irá de tu vida en menos de lo que canta un gallo, y que si se queda muy probablemente te haga mal.
Así que, desde mi humilde teclado, espero de verdad poder ayudar a alguien que se encuentre o se vaya a encontrar en esta situación, espero poder cambiar su suerte, poder evitar una pena y un sufrimiento totalmente innecesarios, aunque sepa que es difícil.
Por favor, no os dejéis manipular, no cedáis a las crueles amenazas de alguien que no merece vuestra atención, no traicionéis vuestros sentimientos, no hagáis algo que sabéis que no queréis hacer... no os dejéis arrastrar.
Nadie se merece sufrir, y menos por algo así.
Con todo mi cariño, y todo mis deseos de servir de ayuda.
Hasta otra.